Google abandonó China en 2010 tras los ataques de hackers. Ahora, la compañía planea su regreso para 2019. El proyecto "Dragonfly" es, al parecer, un motor de búsqueda que censura ciertos términos de búsqueda. Esto ha provocado protestas, sobre todo entre los propios empleados de Google. Sin embargo, según una encuesta a unos 7400 empleados del sector tecnológico, la mayoría de la plantilla de Google apoya la renovada expansión en China. Sin embargo, la comunidad tecnológica en su conjunto tiende a oponerse al plan.


